Bienvenida o bienvenido a mi blog.

Mi deseo es crear un espacio donde poder transmitir mi amor por las esencias florales, base de mi trabajo en terapia y compartir algo que en realidad se ha convertido en mi forma de ver y sentir la vida.

Quiero compartir mis experiencias, conclusiones y reflexiones del día a día.
Me encantaría que si te apetece, aportes todo aquello que te parezca interesante, que debatas, que preguntes, que cuestiones, que juntos podamos seguir creando un espacio vivo, que las esencias florales y el legado que el Dr. Bach nos regaló, siga expandiéndose y cada vez llegue a más personas. Que cada vez seamos más quienes nos beneficiemos de la magia de las flores, que vayamos más allá de la simple toma de remedios florales y seamos capaces de comprender e integrar en nosotros que somos energía, que somos parte de la naturaleza, que sencillamente SOMOS, SOMOS, SOMOS.

Que en nosotros está la magia del cambio. Que somos los únicos responsables de lo que nos da la vida. Que tenemos poder. Que tenemos los recursos necesarios para conectar con nosotros mismos.

Podemos crear, podemos compartir, podemos sentir, podemos amar.
Podemos quedarnos donde estamos y hacerlo conscientemente.
Podemos decidir no hacer nada. Podemos decidir no decidir.

También podemos volar

22 de septiembre de 2010

bleeding heart, corazoncillo.

Hace poco me contaron un cuento.

Al principio de los tiempos, en el planeta, vivían los dos únicos seres. Se amaban profundamente. Se compenetraban, compartían el día a día, lo cotidiano, y a la vez, cada uno de ellos tenía su propio espacio, su tiempo, y vivían en equilibrio y en armonía.
Un día, uno de ellos, observó en el cielo una luz preciosa, lo más bonito que había visto nunca. La cogió entre sus manos y se quedó maravillado por la hermosura de esa luz.
Era algo tan especial, tan bonito que pensó, " esto es tan hermoso, y amo tanto a mi compañero, que qué mejor que regalárselo a él". Y fue hasta donde el otro ser y se lo colocó en las manos. "esto tan hermoso, lo más hermoso que he visto y he tenido nunca,es para tí." Su compañero, lo aceptó ilusionado y con emoción, y al observar esa maravillosa luz, se dio cuenta de lo que era en realidad. Era la felicidad de su compañero. Y al verla, se asustó tanto, que se le cayó de las manos y se rompió.


Esta preciosa flor, ilumina lo que somos, seres únicos, responsables de nuestra propia felicidad. Si colocamos en las manos del otro, en las manos de aquellos a quienes amamos, nuestra felicidad, nos volvemos vulnerables, quedamos a merced del viento, de las tempestades, y sentimos que perdemos nuestra identidad al haberla diluído en la identidad del otro.

Si ponemos en manos de otros nuestra felicidad, perdemos la conexión con nuestro ser, hacemos lo imposible porque esa persona siga siendo la portadora y la cuidadora de nuestro bienestar, creamos relaciones de dependencia y apego, y nos mantenemos en el dolor, provocándonos sufrimiento.

Bleeding Heart, nos ayuda a recuperar nuestra esencia. Eso que somos, únicos y maravillosos, seamos amados o no. Nos ayuda al desapego, potenciando el amor incodicional hacia nosotros mismos, y permitiendo crear relaciones desde "el quiero" más que desde "el necesito".

Nos ayuda a cerrar heridas, a vernos, a querernos, y a responsabilizarnos de la búsqueda de nuestra felicidad.
Ya somos seres completos. Desde ahí, compartamos con los demás sin buscar ser completados por otros.

1 comentario:

Mirinda dijo...

racias por plasmar situaciones cotidianas limitadoras, ¡creas un trampolín de lanzamiento para saltarlas!