Bienvenida o bienvenido a mi blog.

Mi deseo es crear un espacio donde poder transmitir mi amor por las esencias florales, base de mi trabajo en terapia y compartir algo que en realidad se ha convertido en mi forma de ver y sentir la vida.

Quiero compartir mis experiencias, conclusiones y reflexiones del día a día.
Me encantaría que si te apetece, aportes todo aquello que te parezca interesante, que debatas, que preguntes, que cuestiones, que juntos podamos seguir creando un espacio vivo, que las esencias florales y el legado que el Dr. Bach nos regaló, siga expandiéndose y cada vez llegue a más personas. Que cada vez seamos más quienes nos beneficiemos de la magia de las flores, que vayamos más allá de la simple toma de remedios florales y seamos capaces de comprender e integrar en nosotros que somos energía, que somos parte de la naturaleza, que sencillamente SOMOS, SOMOS, SOMOS.

Que en nosotros está la magia del cambio. Que somos los únicos responsables de lo que nos da la vida. Que tenemos poder. Que tenemos los recursos necesarios para conectar con nosotros mismos.

Podemos crear, podemos compartir, podemos sentir, podemos amar.
Podemos quedarnos donde estamos y hacerlo conscientemente.
Podemos decidir no hacer nada. Podemos decidir no decidir.

También podemos volar

10 de septiembre de 2010

Y el corazón me ha traído hasta aquí. Ahora



Hace tiempo que me cuesta sentarme para escribir. Y estoy aquí y ahora. Después de buscarme un tiempo. Un tiempo y un espacio en el que, me he atrevido y he parado a mirarme. Un espacio que me ha permitido sentir y acercarme un poquito más a esto que soy. Un espacio donde me he permitido ser un poco más honesta conmigo. Donde he descubierto la fuerza de lo que soy. Donde compruebo la importancia del silencio, necesario para escucharme y crecer.

Donde acepto el regalo de estar acompañada por otras flores, las esquivas, las que me dan miedo, las que me dan luz y enfrentan e iluminan mis sombras.

Cuando estaba anclada en la presuntuosidad de saber cuáles eran las flores exactas que necesitaba en ese momento, llegó quien me dijo, "no, estás en otro lado". Y esto es hermoso. Es proceso. Es evolución.

Es quitarme la chaqueta vieja, la cómoda, la de los agujeros en los bolsillos, la que ha estado tanto tiempo conmigo que se adapta a mi cuerpo. La que me da calorcito y con la que me veo bonita. La que me da pena tirar, total, aún me sirve para este otoño. La tejida de hilos de Larch, Mímulus, Chicory, Clematis...

Y entonces me dicen que saque de mis bolsillos a Walnut, Agrimony, Hornbeam, una a una, y tantas otras.

Y me asusto, y me atrevo. Y me decido.


Y van llegando los duelos, los desapegos, los nuevos caminos, la sinceridad, los amigos en los momentos precisos en un lugar de autopista, brazos de molino, abrazos, encuentros tras desencuentros, sincronicidades, lo que cuenta.

Y el nuevo camino que se abre delante de mi. De nuevo patas arriba. De nuevo con ganas. Curiosa y perezosa. De nuevo proceso. Y un poco más cerca. Y un poco más atenta a la voz que me va susurrando desde el corazón.

Un poco más atenta al Ser. Y al estar. Aquí y Ahora.


Al camino

1 comentario:

Pilar Vidal Clavería dijo...

Gracias Rosa por compartir con tanta sinceridad lo que otros también sentimos

Un fuerte abrazo